El verde en pro de la salud.
Naranja por la diversidad cultural.
Azul contra el abuso sexual.
Otro blanco en apoyo a la equidad.
Un lazo rosa por la lucha contra el Cáncer de mama.
Plata contra la enfermedad de Parkinson.
Blanco a favor de la paz.
Arcoiris en apoyo a la comunidad GLBT.
Uno color oro para aliviar el cáncer infantil.
Verde para hacer conciencia sobre la donación de órganos.
Una cinta roja por la lucha contra el SIDA.
Amarilla para la prevención del suicidio.
Verde por la campaña de donación de órganos.
Blanca en contra del terrorismo.
Esta roja dice "No al abuso de sustancias".
La negra como señal de duelo por los muertos en la guerra.
Esta otra amarilla por la esperanza en general.
Una blanca y negra en pro de la tolerancia racial
Naranja por el trato humanitario a los animales.
La azul es de la campaña "Conduce sin beber".
Esa de color verde es por la ecología, la protección del medio ambiente y el reciclaje.
Un moño azul por la lucha antitabaco.
Rojo como compromiso para la donación de sangre.
Púrpura para poner fin a la violencia doméstica.
Amarillo por los derechos humanos y los movimientos de igualdad.
Gris para tener en cuenta la diabetes.
Verde para concientizarse sobre la obesidad.
Vino: "No a la violencia".
Este otro morado contra el Alzheimer.
Azul oscuro contra el abuso infantil.
Ese rojo para crear conciencia y el activismo.
¡Entre tantos colores se ha vuelto invisible!
3 comentarios:
Esto es buenísimo Héctor.
Tú lo has dicho INVISIBLE. Más valdría, menos predicar y más hacer.
Un abrazo.
La ratita presumida, lo primero que hizo cuando encontró una moneda, fue comprarse un lazo... eran tiempos menos solidarios, solamente buscaba verse bella.
Un abrazo.
Aclaras bien el hecho que la saturación desvirtúa.
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