En el momento en que a Pinocho
le fue concedido ser de verdad,
no supo qué hacer.
Por primera vez se sintió atado
a las leyes y costumbres del hombre.
IngeniOsciosidades El amor a las palabras, los libros, la literatura, los juEGOS de palabras, textos, ideas, relatos, cuentos, microcuentos, minificciones, poemas, frases, aforismos, greguerías, concentrado de ingenio, pensamientos, sentimientos, haikus, poemas mínimos, poemínimos, sueños, recuerdos, olvidos, espejos, laberintos, ajedrez, el cine, la música, la vida y mUCHas otras cosas más por UCH (Héctor Marcial Ugalde Corral). :]
6 comentarios:
¿Y cuándo nos tocará a nosotros atarnos a las costumbres de Pinocho? Creo que es por ese anhelo que escribimos.
Nos pasa a todos cuando crecemos.
Saludos
...por eso yo me pregunto ahora ¿qué voy a ser cuando sea niño otra vez...tal vez siga a Pinocho...
Creo que Pinocho fue humano desde que lo tallaron, pues su nariz creció y creció con el defecto más mortal.
Me encantan tus pensamientos.
Creo que lo más sabio es permanecer en la fantasía el mayor tiempo posible, y de la realidad solo tomar lo indispensable en breves y esporádicas visitas.
El realismo permanente puede ser destructivo.
Patricia: ¡Paradójico eso de las ataduras! Escribimos para liberarnos... para explorar nuestras verdades con mentiras... :]
Airama: ¡Muy cierto! Aunque, a pesar de las ataduras, podemos liberarnos un poco de ellas y ser niños. :]
Héctor tocayo: Lo primero es ser niños cuando seamos niños otra vez. Y no enredarnos en ataduras a pesar de tener los hilos... :]
Carmela: Pinocho era humano (con los defectos y virtudes de un niño), sólo que no se sentía humano...
Carlos: Tienes mucha razón. Todo exceso es malo. Tanto de realidad, como de fantasía... Muy sabio lo de realidad: sólo la indispensable... :]
¡mUCHos salUCHos! :]
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