Un día, nos quedamos sin palabras.
Las palabras, cansadas de ser utilizadas, se fueron escapando poco a poco.
Al principio, nadie notó su ausencia, pero llegó el momento en que nos miramos confundidos llenos de asombro, sin saber qué decir.
Entonces alguien tuvo una brillante idea. Fue inventando nuevas palabras y las fue anotando.
Así, hijo, fue como se creó este libro: el diccionario.
El niño miró con curiosidad el libro, pero se puso triste.
Pero papá, ¡las palabras están atrapadas!
El hombre sonrió.
Bueno. Jugamos con ellas, las cambiamos un poco. Van transformándose y evolucionando. Pero tienes razón. Están atrapadas. Por eso de tiempo en tiempo las vamos dejando ir y creamos otras nuevas.
El niño se puso feliz. Estaba tan lleno de alegría que no encontraba palabras para expresarlo, así que se puso a inventar nuevas palabras que vivieron felices para siempre
IngeniOsciosidades El amor a las palabras, los libros, la literatura, los juEGOS de palabras, textos, ideas, relatos, cuentos, microcuentos, minificciones, poemas, frases, aforismos, greguerías, concentrado de ingenio, pensamientos, sentimientos, haikus, poemas mínimos, poemínimos, sueños, recuerdos, olvidos, espejos, laberintos, ajedrez, el cine, la música, la vida y mUCHas otras cosas más por UCH (Héctor Marcial Ugalde Corral). :]
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1 comentario:
Más que nuevas palabras, las que ya están poseen infinitas posibilidades.
En ocasiones se llega a construir algo que a uno mismo lo sorprende.
Otras veces sin quererlo cazamos ecos. Ecos que surgen de todas partes.
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